miércoles, 21 de octubre de 2009

Prólogo



Piensa.. Piensa...¿Qué cuesta pensar? Técnicamente nada... Técnicamente mucho...

Simplemente se requieren unos cuantos de kilos de neuronas bien enchufadas y una noción del lugar del que partimos al que queremos llegar. Como tales María, Niña y Pinta se embarcaron bien tripuladas para reencontrarse con un objetivo fijo, las neuronas con una preparación que abarca largos años de educación y aprendizaje descubren un nuevo mundo... EL IMAGINAR.

Ese es un gran problema...¿O una gran solución? Uno puede ser consiente de donde parte, pero hay veces que no se sabe a ciencia cierta a donde se puede llegar. Así defino la INVESTIGACIÓN a partir del PENSAR humano. Partiendo con cuantas naves se desee, de un puerto que se lo puede definir como el inicio del tema, pero el pensar es un GRAN océano con sus mareas, sus olas, sus neblinas, sus tormentas y tempestades. El desafío de uno es embarcarse y recorrer ese gran océano nebuloso.

La única manera de que sople mas fuerte el viento y haga veloz a la carabela de la mente para el descubrimiento de un nuevo mundo es la IMAGINACIÓN. Ésta permite a uno soltar velas y embarcarse al gusto y piacere (y parecer) del viento, llevándolo a interminables vueltas y vueltas perdiéndose en la niebla de la ficción. Igualmente, a pesar de que uno llegue a naufragar, al mismo tiempo, ese viento aleja a la niebla que tapa la costa de un nuevo mundo, de un DESCUBRIR.

Como los españoles y varias civilizaciones anteriores se toparon con el nuevo continente, la IMAGINACIÓN se topa, al menos una vez, con el DESCUBRIMIENTO, permitiendo conocer, así, un poco más la realidad, ya sea mejorándola o empeorándola. ¿Qué irónico no? A partir de la ficción uno puede crear la realidad...
El imaginar e invención de un mundo ficticio traído al presente mismo para descubrir una realidad permite llenar el vaso completamente de conocimiento para beberlo con gran alivio para la mente y alma*, bordeando todo un continente para darle la forma esférica al mundo.
Un claro ejemplo de lo que digo es el de los inventores. Genios e ídolos de las ciencias y demás cátedras. ¿Quién hubiera imaginado que varios transportes que partieron de la imaginación de Da Vinci son, sino, los que hoy usamos y vemos tan frecuentemente, como el avión, o el submarino...?
Igualmente, no cabe duda de que Da Vinci era un genio, sin embargo, eso no le priva el derecho de imaginar y crear para él solo. No es necesario ser licenciado en filosofía o un genio en ciencia cuántica para imaginar, inventar, pensar y descubrir un mundo mejor.
Por eso digo PIENSEN, y sobretodo IMAGINEN y DESCUBRAN su propio mundo por más tonto que parezca.

No se requiere mucho, una embarcación de neuronas con una buena sinapsis y las GANAS de embarcarse en el PENSAR...

Pueden hacer hasta como yo, que vivo sumergido en un Atlantis de IMAGINACIÓN, pensando constantemente en cómo mejorar este mundo, aunque sea el entorno que me rodea... solamente me digo PIENSA... PIENSA...

*Este trago puede refrescar al ser siempre y cuando sea un descubrir o imaginar que beneficie al mundo y a la humanidad, pues, caso contrario, como las armas, las bombas, la maquinaria de destrucción masiva, etc., es un trago AMARGO que puede funcionar de 2 maneras:
Como medicamento, como remedio RANCIO que uno tiene que tomarlo como cualquiera para mejorar nuestra mente y fortalecer nuestra alma para no volvernos a enfermarnos con esa MIERDA que solo sirve para destruir.
O, sino, como simple VENENO que toma esta Humanidad Kamikaze cegada por su propia ignorancia, que tomamos de a sorbos (como el calentamiento global, el efecto invernadero, etc) o a fondo blanco (guerras nucleares, etc) para así suicidar a la humanidad.
Por ende, este trago no lo puede preparar cualquier barman.

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